acrílico sobre tela
Hace mucho frío en Lima, especialmente por las noches. Pero el momento realmente más helado es a la hora del amanecer. A esa hora el calor del sol es prácticamente nulo, pues ha pasado el mayor tiempo transcurrido después del atardecer, y aún el nuevo sol no ha llegado a calentar nada. Tenemos frío cuando nuestra principal fuente de calor está lejos. Tenemos frío cuando estamos a la intemperie. Tenemos frío cuando no estamos protejidos. Y tambien, cuando nuestra otra principal fuente de calor esta lejos, o ya no está. Y el nuevo sol aún no llega. Me da más frío cuando me olvido que el sol saldrá de nuevo. Por suerte, siempre vuelve a salir, a la misma hora, infaltable. Y nos demuestra que hay que tener un poco de paciencia.